En este protocolo se recogen 4 escenarios diferentes en función de la situación sanitaria en la que nos encontremos, que van de modo muy general desde:
1. Fase 1: Un escenario de “nueva normalidad”, con grupos estables que no interactúan entre ellos, y regulación del tránsito y desplazamientos, así como entradas, salidas, comedores, transporte…
En este plan, el principal objetivo es la sectorización de los centros, bien por ciclos, etapas… y dentro de estos sectores establecer grupos estables de hasta 25 niños y niñas, con movilidad muy reducida.
2. Fase 2 con algún brote: En esta fase se bloquearían los sectores, y se pasarían todos los centros a un horario de jornada continua, se suspendería el servicio de comedor, a excepción de personas becadas, y/o desfavorecidas.
3. Fase 3: En este tercer escenario, de brotes de mayor gravedad, se bajarían las ratios a 15/20 alumnos, se buscarían espacios alternativos, se anulan las especialidades y se ocuparían a apoyar desdobles, se ampliaría la contratación docente. Esta fase supondría el cierre de los centros 5 o 10 días para adecuar los espacios.
4. Fase 4: Supondría el cierre de los centros.
Estos escenarios no son cronológicos y se establecen en función de la situación sanitaria en la que nos encontremos.
Así mismo, en cada escenario se recogen diferentes actuaciones en función de las etapas educativas y/o autonomía del alumnado, así como para los centros de educación especial, escuelas de idiomas, conservatorio, escuelas de idiomas…
Como es un borrador, se va a trabajar en él hasta el próximo 25 de junio con los sindicatos y diferentes asociaciones educativas para poder publicar el borrador definitivo entre el 29 y el 30 de junio.
Este borrador establece un protocolo general, que luego cada centro en función de su casuística y características deberá de adaptar y elaborar su propio plan de contingencia. Para ello cada centro tendrá un coordinador COVID algo solicitado por AFAPNA desde el principio.
Se va a dotar a los centros de material sanitario y de señalización que se necesite para desarrollar dicho plan.
- Acondicionamiento de los centros y toma de decisiones durante el mes de julio para dejar todo listo para el inicio de curso.
- Realización de pruebas serológicas periódicas a la comunidad educativa. AFAPNA sigue insistiendo en esta necesidad. Asimismo hemos defendido la necesidad de un enfermero en los centros educativos.
- Reducción de fases en el plan de contingencia. De los 4 estadios en los que piensan que puede desarrollarse el curso 20/21, el Primero es como si aquí no hubiese pasado nada y debe ser más garantista. El plan debe ser realista, concreto y claro. Hay aspectos que deben considerarse desde el principio como bajada de ratios, más personal docente y más medidas preventivas.
- Ratios no superiores a 20 alumnos por grupo.
- Garantizar la distancia de seguridad entre los grupos estables o mantener el uso de la mascarilla en el centro educativo.
- Asegurar que los grupos no coincidan en patio ni comedor.
- Toma de temperatura al inicio y fin de la jornada escolar. Creemos que esta medida, que la han tomado ya empresas y ayuntamientos para 0-3 años, debe extenderse para la comunidad educativa.
- Entradas y salidas diferenciadas y señalización por el centro. Estos aspectos deben ir acompañados de información y formación. Pero para AFAPNA no todo se soluciona con un cursillo al profesorado para enseñarles a lavarse las manos y 4 cosas más.
- Refuerzo del personal de limpieza y de conserjería.
- Una normativa que regule el teletrabajo, en caso de tener que establecer el cuarto escenario de cierre de centros. El sindicato sigue denunciando que es necesaria una normativa que regule el teletrabajo.