Desde el sindicato os informamos del artículo de opinión publicado hoy 21 de mayo de 2020, por el Diario de Navarra sobre el deseo de AFAPNA de vernos en las aulas en septiembre:
En septiembre nos vemos en clase. Esta frase sencilla, conlleva una complejidad en su objetivo que debemos analizar para preparar los medios necesarios para lograrlo. En AFAPNA, sindicato de empleados públicos de Navarra, nos manifestamos con claridad al inicio de la pandemia del coronavirus en relación a los centros educativos, alumnado, docentes y personal auxiliar. A mediados de marzo, con el virus sin control y con los contagios extendiéndose como la pólvora, hubo que cerrar los centros educativos y plantear una continuación del curso por medio del teletrabajo. Sabíamos que no estábamos preparados para ello. Nadie lo había hecho antes pero todos, profesores, alumnos y familias, conjuntamente y con mucho esfuerzo, lo supimos sacar adelante. Pero no es suficiente.
Desde el sindicato AFAPNA queremos vernos en clase en septiembre, queremos ver a nuestros alumnos, a nuestros compañeros, a nuestras familias, en definitiva, a toda la comunidad educativa. Queremos dar las clases de manera presencial y aprovechar lo aprendido estos meses de confinamiento, apoyándonos y adquiriendo las nuevas tecnologías TIC en nuestra vida ordinaria y evitar, así, esos primeros momentos de confusión que todos sufrimos al principio. Tenemos mucha labor por delante. Si queremos vernos en septiembre, debemos aprovechar cada minuto para prepararlo todo. No podemos ni debemos permitirnos la falta de concentración. Tenemos que tenerlo todo previsto. Sabemos que al coronavirus le estamos ganando la guerra. Nos está costando mucho, es cierto. Ciento de miles de personas contagiadas, miles de ellas fallecidas, pero juntos estamos venciendo con esfuerzo y entereza.
Ahora no podemos flaquear. Nos falta otra batalla, la de la normalidad. La de la vuelta al empleo. Sabemos que va a ser muy duro pero también sabemos que esta tierra, este país, unido, es capaz de superar las mayores dificultades. Sabemos que las familias necesitan apoyo con sus hijos, que necesitan saber que sus hijos/as van a estar en el colegio o en el instituto bien atendidos y, por supuesto, con todas las medidas de protección necesarias para evitar los contagios. Evidentemente, adaptar los centros educativos para que todo el alumnado pueda tener clases presenciales, requiere de una extraordinaria gestión y organización, de adaptación de espacios y de una inversión económica importante. Pero AFAPNA lo tiene claro. El sindicato está seguro que ese esfuerzo, esa inversión, se debe realizar con primor, puesto que es lo que la ciudadanía quiere, y así las familias navarras podrán conciliar su vida laboral con la de sus hijos/as, y repercutirá en un gran impulso al motor de la economía. Es cierto que hay que realizar un estudio exhaustivo de todos los centros de Navarra, y así conocer cómo podría organizarse tanto las aulas como otros espacios físicos que, hasta ahora, muchos de ellos no eran dedicados a la impartición de la docencia, pero que podrían habilitarse para ello. Necesitamos, además, delimitar el alumnado que habrá en cada uno de esos espacios y marcar los mismos para garantizar, en la medida de los posible, las distancias de seguridad. Y es que los espacios de recreo también deberían ser marcados y separados para evitar aglomeraciones del alumnado de diferentes aulas.
Es vital que todo esto esté ya estudiado para tener previsto tanto los sistemas de transporte como los del comedor, si este fuera necesario. La limpieza dentro del centro, sobre todo en los baños y en las aulas, requeriría personal de limpieza estable en el mismo. Asimismo, un control en la toma de temperatura diaria al alumnado, personal docente y auxiliar, serviría para el control de los contagios dentro del recinto. Habría que establecer, además, el mayor número de reuniones que pudieran darse de forma no presencial, y las presenciales deberían ser con la pertinente distancia de seguridad y EPIS.
Y otro tema a tener en cuenta, sería que el modelo de jornada en los centros fuese el de la jornada continua, una fórmula unida a una flexibilidad en los horarios de las empresas, que nos permitiría conseguir el objetivo que todos andamos buscando; la vuelta a las aulas en septiembre y el impulso económico que supone la vuelta al trabajo de las empresas. Y como responsable del sindicato AFAPNA, no puedo despedirme sin dar las gracias a las familias, el alumnado y a los docentes por el esfuerzo titánico a lo largo de estos meses. Como decía al principio, en septiembre nos vemos en clase.
Juan Carlos Laboreo Presidente de AFAPNA
Somos como TÚ, Empleados Públicos